La peor noche de mi vida.

Todo comenzó un sábado por la tarde, cuando Bruno y yo nos arreglábamos para ir a Callosa a salir con los Naranjitos (aunque al final sólo fue Jaime xD) a cenar y a tomar algo. Fuimos a un chino SUPER destroyer, pedimos menú para 4 personas (éramos 5, se supone que yo no comía porque era casi todo carne, menos el arroz y tal) y un Udon para mí. Eran como unos spaghetti muy grandes con verduritas, con demasiado aceite pero muy buenos :)


El caso es que se quedó casi toda la comida en la mesa! Y eso que yo ayudé con el arroz un poco, pero nada, que se ve que la gente no tenía mucha hambre. A mí, un leve dolor de barriga que llevaba de tiempo me empeoró bastante. (Llegó un momento que iba casi zombi en el coche) Después del chino, Bruno, Jaime y yo nos fuimos a la tetería de Jacarilla, La Cueva. La verdad es que es un sitio que a mí me gusta mucho mucho, tiene mesas dentro y una terraza jardín super grande con casetas individuales, muy bien decorada, ¡y además con unos tés y unas cosas que están riquísimos! Sólo tengo la foto de una vez que fui con Bruno en verano, que pedimos un batido de mango y uno de chocolate, muy fresquitos y enormes!


Esta vez yo pedí un té afgano (de vainilla) con leche, y ellos un té paquistaní (de canela) con leche también. Trajeron una tetera enorme para ellos que les dio para 3 tazas al menos, y a mí una más peque, pero también me tomé unas dos tazas y media. Bueno, entre la leche calentita, la vainilla y la canela, y que eran las 3 de la mañana, yo me puse tontísima que ya no sabía si iba o venía, al menos el dolor de estómago se me pasó! Encima cambiaban la hora, así que llegamos a casa de Bruno a las 4:30 de la madrugada y como no teníamos ganas de dormir, dijimos de ver una peli. Como se ve que somos masocas pero ya hacía tiempo que queríamos verla, pusimos El Exorcista. Total, viendo la peli lo pasamos bien porque parece ser la única peli en el mundo con la que Bruno se medio asusta y yo no jujujuju bueno, o eso creía yo. Terminamos de ver la película a las 6:30, y ya nos fuimos a dormir porque estábamos casi en coma. Y aquí empezó mi odisea. Estando ya metidos en la cama, Bruno cayó rendido ipsofacto, y yo estaba tumbada al lado que no me había dado tiempo ni a ponerme cómoda cuando de repente, empiezo a notar que a Bruno le dan espasmos en el brazo. Al instante, se me abren los ojos como platos y me escagarrité viva, vaya.


Yo me autosugestiono demasiado rápidamente, y claro, pues después de la peli, ¡¿qué iba a pensar yo? "Ay dios, que Bruno está poseído o_o" Yo ya veía fantasmas y demonios Pazuzu por todas partes y encima a Bruno los espasmos no le paraban y por si fuera poco, cuando coge posturas raras ronca un poco y parecía la niña y yo no podía más. Estaba rígida como un palo pensando "está poseído está poseído está poseído está poseído está poseído!!!!!!!" esas cosas que quieres dejar de pensar pero tu cabeza no te lo permite. Pasaron unas dos horas y pico así, yo tenía un calor para morirme, Bruno seguía con sus espasmos y sus ruidos de Satán y dije "bueno, voy al aseo y me lavo la cara y me refresco un poco". Allá que fui, cuando llego, el terrible dilema: ¿Cierro la puerta o no? Y lógicamente pensé: la dejo abierta, porque como la cierre y oiga ruidos fuera me quedo a dormir encima del váter. Cuando terminé, volví a la cama, y Bruno medio dormido me dijo "Cariño, porfa vete a la otra cama" (de todos es sabido que a Bruno no le gusta dormir acompañado a no ser que sea en cama de 2x2) , a lo que respondí: "cielo, es que no puedo. Tengo mucho miedo". Bruno me miró con el ojo atravesado y dijo: "Ostias Carmen!" y ahí sí que me entró miedo y dije "vale vale vale me voy!". Me trasladé con mi terror a la habitación de enfrente, la de su hermana, y a todo esto eran las 9 de la mañana. Como ya era de día y no había pegado ojo, dije "bueno, pa qué" y subí las persianas, encendí todas las luces que me fue posible, y cogí los mangas del Zelda que tiene mi cuñada y me puse a leer. Cuando dieron casi las 10, oigo a Bruno que me dice desde su habitación: "cariño duérmete". Y la verdad es que ahí sí me entró sueño, y por fin, después de la peor noche de mi vida, me pude dormir. Bruno me despertó a las 12, así que más bien fue poco lo que dormí, pero bueno, ya tengo una historia que contar a mis nietos. Fue horrible, de verdad :O Nunca más ver pelis de miedo de madrugada. I swear.

PD: ¡En el chino destroyer me regalaron unos palillos muy bonitos!


Lo malo es que están como barnizados, para que quede bonito, pero al llevar tanto aceite la comida de allí se resbalaba todo, así que tuve que comer con cuchillo y tenedor de toda la vida, vaya.